CAMBIO EXTREMO
VALE LA PENA CAMBIAR? Escuché la historia de una señora (ya anciana) que se fue a vivir a otro país siendo muy joven. Allí comenzó una nueva vida y después de muchos años, lo único que le quedó de su vida en el país donde nació fueron unas fotos familiares. Perdió todo contacto con la familia que dejó atrás y aún olvidó como era su ciudad natal. No hay que pensar mucho para saber que también se olvidó de sus amistades, de sus compañeros de estudio y de algún novio que haya tenido. Personalmente he vivido algo parecido, aunque no tan radical. He vivido en varias ciudades de mi país. En cada una de ellas, he realizado las actividades normales de cualquier persona. He conocido gente con la que he compartido alegrías y tristezas. Hemos compartido actividades sociales, deportivas, académicas, religiosas, culturales y un sinnúmero de situaciones que me han permitido tener buenas amistades y personas que en su momento se podrían llamar "amigos". Sin embargo con el correr del tiempo ...