AL ABRIGO DEL ALTÍSIMO

SALMO 91:1-2

Un recuerdo que guardaré por siempre en mi corazón y que estoy segura todo papá o mamá también lo tiene, es la imagen del hijo pequeño, cuando estiraba sus brazos para que lo alcemos ya sea porque está cansado o porque tiene miedo, sueño, hambre o simplemente porque se siente seguro en ese lugar alto (para él). Nuestros hijos serán siempre nuestros "niños" por adultos que sean. Ellos siempre encontrarán "refugio" en sus padres. Sin embargo con el transcurrir de los años, muy seguramente el rol se cambiará. Ya no serán los padres quienes alcen a sus hijos, sino los hijos quienes sostienen a sus viejos. Pero esta relación padre-hijo no siempre se da, porque muchos padres abandonan a los hijos desde pequeños y muchos hijos abandonan a sus padres cuando son grandes.

HABITAR según la RAE significa vivir o morar. según el diccionario bíblico es permanecer en Jesús. El abrigo es una prenda larga que cubre del frío a quien lo usa, o a quien se le acerca . Mientras más alto nos ubiquemos, mas grande es el panorama que podemos divisar. Si Dios es el ser que está por encima de todo y de todos, ¿cuánto podrá cubrir? Pero el versículo dice que "EL QUE". Si bien es cierto Dios nos ve a todos, solo los que nos acercamos a Él, seremos los que estaremos abrigados por Él.  Una vez yo me acerque A Él le puedo decir que es mi refugio, mi fortaleza y el Dios en quien confío. Hoy la pandemia nos ha atemorizado. Es el momento de ser más conscientes de que si Dios está con nosotros, quien podrá contra nosotros? Señor me abrazo a ti. Me acerco a ti. En tus brazos estaré segura. Quiero habitar bajo tu abrigo siempre. Te lo pido en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.

Hay un lugar oculto espiritual junto al creador. Como estamos en este lugar en nuestra vida espiritual?. Una parte nuestra está conectada con el creador. Cuando recibimos a Jesucristo como nuestro Señor y Salvador, también recibimos al Espíritu Santo. Nuestro espíritu se comunica con Su Espíritu. En la sombra de Dios descansamos. Estamos ocultos con el Altísimo, pero estamos en la tierra. Cuando soy consciente del nivel del cual estoy pegada al creador, en la tierra, estoy bajo la sombra del Creador. Estoy bien protegida arriba, pero también lo estoy abajo, acá en la tierra. Me está protegiendo el mismo Dios. Los malos espíritus huyen cuando ven el nombre de Dios, porque su Poder hace huir a nuestros enemigos. Por eso cuando estoy bien conectada con el Creador espiritualmente hablando, estoy protegida porque El es mi fortaleza.  Yo vivo permanentemente en la presencia de Dios.  Mi vida íntima la está viendo Él. ¿Qué vé?

La santidad de Dios y la justicia que no tenemos por nuestras propias fuerzas, solo la tiene Jesucristo. Cuando le entregamos el control de nuestra vida a Jesucristo, su Santidad se refleja en nosotros.  Dios nos protege de todo aquello que nos puede causar daño, no es el hombre por mas poder que tenga.

Acerquémonos al Dios OMNIPOTENTE

  

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