FE


 

FE

Por naturaleza todos los seres humanos somos personas con fe. Creemos que FE es un tema espiritual y si le preguntamos a alguien si tiene fe, normalmente lo piensa, porque lo relaciona con DIOS o con dios. Pero una prueba de que todos tenemos fé es analizando nuestra cotidianidad. Cuando me voy a sentar en una silla, normalmente lo hago sin dudar de que esa silla puede estar dañada y que si me siento me pueda caer. Cuando compro un alimento en la calle, lo consumo sin pensar en que ese alimento me puede causar daño. Si tomo un transporte público, confío en que me va a llevar al lugar para donde quiero ir. Si acudo a un médico o a los servicios de alguna persona, creo que está preparada para brindarme un buen servicio. Igualmente si voy a abrir una chapa confío en que esa llave la puede abrir. Obviamente si es la llave correcta, lo puedo hacer.

Según la RAE,  fe significa confianza o buen concepto que se tiene en alguien o de algo. Tanto ésta definición como lo que he escrito tiene que ver con una fe física. Para esa fe normalmente se utilizan los sentidos.

Pero el tema de hoy  tiene que ver con la FE ESPIRITUAL. Hebreos 11:1, la define así:

FE ES LA CERTEZA DE LO QUE SE ESPERA, LA CONVICCIÓN DE LO QUE NO SE VE.

En la biblia hay aproximadamente 80 versículos que hablan sobre la fe. Leerlos y aplicarlos a nuestra vida, nos permite ampliar este concepto y entender desde la perspectiva espiritual en que consiste la fe.

La FE es fortalecida interiormente por el Espíritu Santo o sea que no es "conocimiento intelectual".  Efesios 3:16-17.

Nos movemos por FE, no por vista. 2 corintios 5:7

Quien tiene fe, no duda. Santiago 1:6

Para acercarme a Dios, debo creer que Él existe. Hebreos 11:6

Quien cree verá la Gloria de Dios. Juan 11:40

La FE no me deja desfallecer. Santiago 1:3; Marcos 9:23

La FE no radica en la confianza que tengo en mi misma(o), sino en la confianza que tengo en Dios. Por esto es importante aprender a escuchar la voz (no audible) de Dios. Comúnmente le oímos decir a las personas "el Señor me dijo". Cómo puedo estar segura de que "el Señor me dijo"? Según la Biblia, Dios y Jesucristo están ligados. No puedo decir que creo en Dios, si desconozco a Jesucristo o si hay otra "divinidad" entre ellos dos. Con ésta convicción, invito a Cristo a tomar control de mi vida. Se me presentan dos alternativas: seguir el conocimiento intelectual a través de la ciencia y la filosofía, o seguir a Cristo. Todo lo creado tiene que tener un ser superior que lo creó. Por qué entonces darle prioridad a la creación y no al creador? Al interesarme en conocer a ese ser superior, puedo oír su voz. Esa voz se llama JESUCRISTO.

El método que Dios utilizó para comunicarse con el ser humano fue a través de SU HIJO. Cuando me relaciono con alguien frecuentemente, puedo conocer su modo de pensar, sus costumbres, sus gustos y al mismo tiempo esa persona también me conoce. Si tengo una relación intencional y personal con Jesucristo, mi FE también crecerá.

Volviendo a la definición de FE. Si ésta es la certeza de lo que espero, pongo en práctica esa certeza. Conocí una señora muy pobre (económicamente hablando) a quien le pregunté como estaba. La respuesta que me dio, me causó risa, pero también tristeza: "será decir que bien". Muy seguramente ella no quería inspirar lástima por su condición, pero interiormente no estaba convencida de que estaba bien, como tampoco tenía la certeza de que saldría de esa situación.

Generalmente ponemos nuestra confianza en nuestras capacidades físicas o intelectuales, en el poder económico familiar o personal, en la institución o empresa donde laboramos, en las ayudas que proporciona el gobierno, pero ¿qué sucede si se acaban nuestras fuerzas físicas para trabajar? ¿cómo nos sentimos cuando hay una quiebra económica? ¿que siente una persona cuando es despedida del trabajo? 

La situación que vive la humanidad entera durante ésta pandemia, ha sido muy difícil asimilarla. Son muchas las personas que se esmeraron por prepararse intelectualmente para trabajar o dedicaron todos sus recursos físicos, económicos y personales para construir una empresa, pero las circunstancias actuales los llevaron a perderlo todo.  

Certeza significa conocimiento claro y seguro que se tiene de algo o de alguien. El nuevo testamento es CRISTOCENTRICO, es decir todas sus enseñanzas apuntan a CRISTO. En la medida que conozco a JESUCRISTO, adquiero la certeza de quien es Él, que hizo, por qué lo hizo y para quién lo hizo.

Si fallan nuestras fuerzas o capacidades, si fallan las instituciones públicas o privadas, entonces que nos queda?. Generalmente oímos decir cuando alguien está atravesando un difícil momento en su vida, que esa persona "quedó a la de dios". Es decir quedó a la deriva; desamparado, nadie lo puede ayudar. Y ésto es así, si estamos hablando de quedar a la de un dios con "d" minúscula. En lugar de quejarnos por la mala situación que estamos atravesando, debemos empeñarnos en buscar al DIOS verdadero, el que creó los cielos y la tierra, el que nos hizo a su imagen y semejanza. Él es quien nos da dirección. Con Él podemos tener comunión.  Si cuando estábamos viviendo bien, podíamos compartir las bendiciones de Dios, qué sucede ahora que estamos atravesando un desierto? Si tengo la certeza de que Dios no me ha abandonado, aún en medio de las dificultades que estoy viviendo, es tiempo de recordar lo que leí en Mateo 14:25-31

Mas a la cuarta vigilia de la noche, Jesús vino a ellos andando sobre el mar. Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma! Y dieron voces de miedo. Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis! Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas. Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús. Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame! Al momento Jesús, extendiendo la mano, asió de él, y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?

A la luz de la sicología moderna, Pedro era un hombre de temperamento colérico,  impulsivo, impetuoso y con tendencia al liderazgo. De todos los que estaban en la barca, solo a él se le ocurrió hacer semejante petición. Sin embargo cuando ya estaba en el punto de "no retorno" tuvo miedo y no le quedó mas recurso que acudir a Jesús para que lo salvara. La respuesta de Jesús no solo fue salvarlo, sino decirle que él (Pedro) confiaba poco en Él (Jesús).

Si tu estás atravesado un desierto, o una tempestad agita las aguas de tu vida, es tiempo de hacer lo que hizo Pedro, bajar de la barca confiando en Jesús. Pedro lo hizo, pero fue mas grande el temor al fuerte viento, que la confianza en que Jesús lo podría sostener. Por eso lo llamó "hombre de poca fe". 

No dudemos en Jesucristo. Él mas que cualquiera de nosotros sabía perfectamente que viviríamos esta difícil situación que hoy estamos experimentando. Sigamos con la mirada puesta en Él. No permitamos que las circunstancias difíciles nos distraigan y nos alejen de Dios. Si nuestro fundamento para la FE es la Palabra de Dios, estamos en el camino correcto. Él nos está extendiendo la mano. Es el momento de tomarla sin dudar.

Señor tu prometiste estar con nosotros todos los días. Hoy me aferro a tus promesas y confío en que nos darás fuerzas, nos ayudarás y nos llevarás de la mano, la misma mano que aferró a Pedro para que no se hundiera.





Comentarios

Entradas populares de este blog

GRACIA Y VERDAD

CIMIENTOS

1. ENSÉÑANOS A ORAR.