Y TU CORAZÓN?
Malaquías 1:11
Después de salir del cautiverio de Babilonia, los israelitas tienen los recursos para adorar al señor día y noche, pero el Señor manifiesta en Malaquías 1:11 que el corazón de los sacerdotes no le agradaba. acababan de salir de un tremendo cautiverio, pero su corazón no estaba unido al de Él. Pero que va a levantar de los gentiles personas que si lo van a alabar como El lo desea. Un movimiento global que provocaría a celos a Israel, llenaría a todo el mundo de incienso de los santos.
Es importante discernir lo que estamos viviendo hoy. Somos parte de ese movimiento. Desde los apóstoles hasta 1999 había un lugar de oración día y noche cada 100 años. Se ha encontrado que desde el año 2.000 ha habido un avivamiento poderoso, hay mas de 25.000 lugares de oración donde se adora día y noche. Hoy permanentemente estamos escuchando a mas personas hablar del Señor. El nivel de incienso que Dios está levantando es abrumador. En apocalipsis 5:8 Juan ve el momento justo antes de que Jesucristo regrese a tomar posesión de la tierra, que los ángeles tienen copas llenas de incienso. Estas son las oraciones justas de los santos. Toda la oración que nosotros hacemos, la escucha el Señor.
Estas copas llenas son las oraciones desde Abraham, Isaac, Jacob, Noe, Salomón y de todos los que oraron hace mas de 6.000 años, se rebosan en las copas de incienso que Juan ve. Hoy nos tocó vivir una generación que tenemos grandes privilegios, porque no somos espectadores. Tenemos una gran responsabilidad. Daniel está ayunando en medio de la esclavitud y un ángel le dice que Dios ha escuchado sus oraciones. Fue el efecto de un hombre. Y ¿cuánto más será hoy con tanta gente elevando oraciones y adoraciones al Dios vivo? Todos tenemos el ministerio de intercesión, para que frenemos al acusador. Es la identidad del cuerpo de Cristo a través de la historia.
Hagamos lo que Jesucristo hizo: interceder ante el Padre. Hoy tenemos muchos ataques, pero también la gracia, para frenar esos ataques. No seamos como la generación de Malaquías. No tengamos un corazón separado de Dios. veamos la gracia, para orar. Es la oportunidad de vivir como el Señor lo anhela. el incensario creaba una nube espesa para que no vieran a Dios, cuando El llegara. Pero hoy nuestras oraciones que son como incienso, cambian la atmosfera espiritual y la Gloria de Dios se puede manifestar. Rompamos la pasividad y respondamos a Dios tal como Él lo anhela,
Si le abres tu corazón a Dios, Él hará cambios en tu vida. Serás transformado y volarás como un águila.
META-MORFÉ MAS ALLÁ DE LA FORMA ANTERIOR
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