EL QUE A BUEN ARBOL SE ARRIMA...

 

MATEO 12:21-50 

ARBOL BUENO, FRUTOS BUENOS

Continuando con la lectura de Mateo 12,  aprendemos varias enseñanzas:

1. ¿Con qué propósito busco a Jesucristo? ¿Lo conozco realmente?

Los fariseos y los sacerdotes siguen buscando de que acusar a Jesucristo. Dicen que los milagros que hace, los hace, en el nombre de satanás. Su religiosidad los tenía ciegos espiritualmente. 

 [22] Entonces fue traído a él un endemoniado, ciego y mudo; y le sanó, de tal manera que el ciego y mudo veía y hablaba.  [24] Mas los fariseos, al oírlo, decían: Este no echa fuera los demonios sino por Beelzebú, príncipe de los demonios. [25] Sabiendo Jesús los pensamientos de ellos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo, es asolado, y toda ciudad o casa dividida contra sí misma, no permanecerá. [26] Y si Satanás echa fuera a Satanás, contra sí mismo está dividido; ¿cómo, pues, permanecerá su reino? [27] Y si yo echo fuera los demonios por Beelzebú, ¿por quién los echan vuestros hijos? Por tanto, ellos serán vuestros jueces. [28] Pero si yo por el Espíritu de Dios echo fuera los demonios, ciertamente ha llegado a vosotros el reino de Dios. [29] Porque ¿cómo puede alguno entrar en la casa del hombre fuerte, y saquear sus bienes, si primero no le ata? Y entonces podrá saquear su casa.

2 . Escoger a quien seguir: A Dios o a satanás. Con Dios no hay medias tintas. 

[30] El que no es conmigo, contra mí es; y el que conmigo no recoge, desparrama.

3. Los milagros que Jesús hacía, eran por el Poder de Dios. El mismo Poder que lo resucitó más adelante. Aún no se había manifestado el Espíritu Santo entre los hombres, porque fue enviado después de que Jesucristo subió a la diestra de Dios Padre. Por este motivo, rechazar los milagros de Jesucristo, era negar la obra de Dios y del Espíritu Santo. ¿Soy consciente de que mi cuerpo es el templo del Espiritu Santo?

 [31] Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no les será perdonada. [32] A cualquiera que dijere alguna palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que hable contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo ni en el venidero.

4. Mis obras dicen que hay en el corazón.  Aún mi manera de hablar da testimonio de quien soy. 

 [33] O haced el árbol bueno, y su fruto bueno, o haced el árbol malo, y su fruto malo; porque por el fruto se conoce el árbol. [34] ¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca. [35] El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas. [36] Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio. [37] Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado.  

5. Jesús cita el Antiguo testamento. Jonás 1:17, cuando los escribas y los fariseos,  le demandan señal. Sin decirlo abiertamente, ya estaba anunciando su muerte.

[40] Porque como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches. [41] Los hombres de Nínive se levantarán en el juicio con esta generación, y la condenarán; porque ellos se arrepintieron a la predicación de Jonás, y he aquí más que Jonás en este lugar. [42] La reina del Sur se levantará en el juicio con esta generación, y la condenará; porque ella vino de los fines de la tierra para oír la sabiduría de Salomón, y he aquí más que Salomón en este lugar. 

6. El peligro de una conversión a medias. 

  [43] Cuando el espíritu inmundo sale del hombre, anda por lugares secos, buscando reposo, y no lo halla. [44] Entonces dice: Volveré a mi casa de donde salí; y cuando llega, la halla desocupada, barrida y adornada. [45] Entonces va, y toma consigo otros siete espíritus peores que él, y entrados, moran allí; y el postrer estado de aquel hombre viene a ser peor que el primero. Así también acontecerá a esta mala generación. 

7 . Para Jesucristo era muy importante cumplir la labor encomendada por Dios. Por eso no quiso dejar la multitud para ir a hablar con su familia de sangre.  Con ésta actitud hacia ellos, confirmó que Dios no hace acepción de personas. Hoy nosotros tenemos el privilegio de ser esas personas que Jesús señaló como su hermano, su hermana y su madre, al hacer la voluntad del Padre.

[47] Y le dijo uno: He aquí tu madre y tus hermanos están afuera, y te quieren hablar. [48] Respondiendo Él al que le decía esto, dijo: ¿Quién es mi madre, y quiénes son mis hermanos? [49] Y extendiendo su mano hacia sus discípulos, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos. [50] Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ese es mi hermano, y hermana, y madre.

Señor gracias por permitirme entender a través de tu palabra que no solamente debo buscarte para recibir un milagro, sino para que me quites la ceguera espiritual y así poder verte. En ella tu me enseñas a conocerte, para seguirte. Ayúdame a ser como un árbol que da buenos frutos, siendo una persona temerosa de ti, responsable, confiable y seguidora de tus enseñanzas. Deseo tener un corazón limpio, para que por mis labios salgan palabras de bendición que edifiquen a quien me escucha. Anhelo formar parte de tu familia, haciendo la voluntad del Padre. Oro en el nombre del Señor Jesucristo. 

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https://bible.com/bible/149/mat.12.21-50.RVR1960