MATEO 13:44-46 TESORO ESCONDIDO
EL TESORO ESCONDIDO
LA PERLA DE GRAN PRECIO
Mateo 13:45 También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas, 46 que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró.
Cuando deseamos comprar un bien material, quizás muy costoso y casi fuera del alcance de nuestras capacidades económicas, se nos puede volver una obsesión lo deseado al punto de proponernos hacer lo que sea para adquirirlo. Llámese casa, carro, paseo, joya, dinero, etc.
Muchas personas sin escrúpulos, pueden llegar a matar o robar para adquirir lo que tanto anhelan. Sin embargo, hay algo que supera cualquier valor económico y quizás no lo deseamos con tanta intensidad. Se llama REINO DE LOS CIELOS O SALVACIÓN.
Estas dos parábolas comparan al reino de los cielos con UN TESORO. No sólo tiene un gran valor, sino que no está a la vista física de las personas. Sin embargo está disponible para cualquier persona sin importar nacionalidad, raza, condición socio económica. Unos bienes materiales costosos, requieren un gran poder adquisitivo. Otros una disposición física o intelectual para usarlos. Algunos una condición social, como pertenecer a un club por ejemplo.
Ese tesoro no está tan lejos, ni tan inalcanzable. Es personal e intransferible, solo se necesita desear tenerlo. "Vender todo lo que tiene para comprarlo" no quiere decir que con dinero se compra. El precio lo pagó Jesucristo con su propia vida y nos lo ofrece de manera gratuita. Pero sí debemos dejar de lado muchas cosas que no podemos llevar al "Reino de los cielos". Muchos pasajes de la biblia, nos enseñan que es lo que tenemos que "vender" (es decir dejar a un lado) para recibir ese maravilloso regalo:
Romanos 1:29 nos enseña que no podemos llevar al "reino de los cielos": odio, resentimiento raíces de amargura, celos, pornografía, drogadicción alcoholismo, homosexualismo.
Gálatas 5:19: 19Ahora bien, las obras de la carne son evidentes. Estas son: inmoralidad sexual, impureza, desenfreno, 20idolatría, hechicería, enemistades, pleitos, celos, ira, contiendas, disensiones, partidismos, 21envidia, borracheras, orgías y cosas semejantes a estas, de las cuales les advierto, como ya lo hice antes, que los que hacen tales cosas no heredarán el reino de Dios.


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